UNA VERDADERA OFENSIVA LLEVA A CABO

LA ETA EN ESPAÑA

 

Por Rolando Arturo Leiva

9 agosto 2000

 

Heidelberg (Alemania) - Las acciones de la organización separatista ETA en

España, han adquirido características de una verdadera ofensiva. Esto se

desprende, tanto de la reciente secuencia de hechos, -que ha estremecido a ese

país en los últimos tres días-, como de lo que sostienen la mayoría de los medios

de prensa españoles, en sus últimas ediciones dedicadas al tema.

La semana se inaguraría, primero, con la noticia de la gigantesca explosión que

destruyó a una furgoneta en un cruce de carreteras que conduce a Bilbao, la capital

del país vasco, o Euzkadi. En el vehículo viajaban 4 personas, todas pertenecientes

a la organización ETA. Se ha venido a conocer después, que transportaban no

menos de 25 kilos de explosivos, del tipo de titadine, una clase de dinamita robada

por aquella organización en gran cantidad de un polvorín de la ciudad de Plevin,

Bretaña francesa, durante la tregua que se autoconcediera a mediados del año

1998. Los cuerpos de los ocupantes, resultaron tan desintegrados por la explosión,

que quedaron diseminados y repartidos a lo largo de un radio de 50 metros. Un día

después, la policía tenía aún dificultades para determinar incluso a qué sexo

pertenecían los restos humanos hallados. Se presume en la actualidad, que el

grupo viajaba en el vehículo yendo en proceso de poner a punto un dispositivo de

detonación de una bomba a control remoto, con el objetivo, más o menos seguro,

de realizar un nuevo atentado, y llevando como jefe, a Francisco Rementería

Barruetabeña, un miembro del grupo de 39 años de edad, acusado de 19 distintos

delitos de terrorismo, entre ellos cuatro homicidios. Rementería había sido detenido

en Francia el año 1986. Después se le deportó a Cabo Verde por no haber

presentado España solicitud de extradicción. En ese lugar, permaneció una década,

para huir de allí después de aquel tiempo, y reintegrarse a la organización. Las

identidades del resto de los ocupantes, no son, sin embargo, todavía completamente

seguras, estando el cuarto ocupante aún no identificado.

Por tratarse ésta de una de las acciones en que la organización ha perdido el

número quizás mayor de miembros, y posiblemente el más grande, se estimaba en

consecuencia a principios de esta semana, que el hecho se va a transformar en un

golpe a la organización de la cual ésta ya tardará mucho tiempo en recuperarse.

Los atentados de ayer, martes 9 de agosto, a través del cual sería asesinado,

primero, con un coche bomba, el Presidente del sindicato patronal Adegi,

perteneciente a la ciudad de Guizpucoa, -José María Korta-, y el atentado que le

seguiría, horas después, en el cual otro coche bomba, colocado en el barrio

Charmentín de Madrid, desvastó todo un sector residencial en la calle de Platerías,

han venido a desmentir drásticamente esa suposición.

En el primer caso, el empresario vasco, José Maria Korta, perdería la vida al

momento de hacer explosión un auto bomba aparcado a un costado del suyo, y

cuando él se aprestaba a abordar el suyo. El hecho ocurrió enfrente del complejo

industrial del mismo nombre, -Korta-, del cuál éste era su propietario. Para diversos

círculos, el atentado forma parte de una campaña de intimidación del empresariado

vasco que intenta ETA, a fin de que éste presione a su vez a las autoridades

nacionalistas vascas más moderadas, y éstas por su parte hagan otro tanto frente

las autoridades centrales españolas.

De la misma manera, el atentado en la Calle de Platerías en Madrid, ocurriría

después de recibir la policía y los bombreros una llamada anónima anunciando la

colocación de otro coche bomba. La explosión tendría lugar, sin embargo, 10

minutos antes de lo anunciado, lo que se constituyó en la causa de que se

produjeran 10 víctimas , entre ellas un bombero herido grave.

De acuerdo a lo señalado por diversos sectores, se puede decir entonces que “la

actual escalada de ETA es una ofensiva sin precedentes. Ha cometido o intentado

este año 21 atentados, once de ellos en menos de un mes, incluyendo ocho

asesinatos”. Al mismo tiempo, la diversidad de objetivos (políticos, periodistas,

militares, empresarios) y de lugares de actuación , en varias comunidades, sugiere,

-escribía también EL PAÍS de hoy- “que la banda se ha lanzado a un desafío total

del Estado para intentar que claudique. Fuentes de la lucha antiterrorista conciden

en que la ofensiva puede ser “durísima”, hasta fin de este año”.

La organización ETA, como se recordará, declararía el 16 de septiembre de 1998,

una tregua unilateral, a la cual daría ella misma también término, exactamente el

día 3 de diciembre de 1999 . Hoy es considerado, casi por todos, que aquel período

de tiempo, ha sido el único año y medio sin víctimas mortales desde fines de la

década del 70. Cuatro días antes de que fuera declarada esa tregua, partidos,

sindicatos y organizaciones nacionalistas vascas, habían suscrito en la ciudad de

Estella (Navarra) el llamado Pacto de Lizarra, por lo cual , hasta ahora, el nombre

de la primera localidad, Estella, da nombre también a la tregua, la que se conoce,

por tanto, como la “Tregua de Estella”. El 19 de mayo de 1999, a su vez , tuvo lugar

la única reunión que ha existido hasta ahora entre la organización ETA y las

autoridades del gobierno español. El encuentro tendría lugar en la ciudad de Zürich,

para terminar lamentablemente con la declaración porambas partes de la

irreconciabilidad de sus posiciones.

Así entonces, apenas 17 días después que ETA comunicara que ponía fin a la

tregua, el 21 de enero del presente año, tendría lugar el primer atentado, que fuera

llevado a cabo mediante un coche explosivo colocado en un barrio residencial de

Madrid. A través de él, perdió la vida un militar con el grado de Comandante, y

como siempre, produjo la devastación de todo un sector residencial. Desde el 21 de

enero a la fecha, han ocurrido ya 8 nuevos asesinatos, atentados diversos, -algunos

especialmente conmocionantes-, como fue el del ex gobernador socialista de la

provincia vasca, Juan María Jauregui, que se había autoexiliado por el riesgo a su

vida que veía en su tierra natal y que se encontraba de retorno, de incógnito, por un

corto período. Sus victimarios, tardarían apenas una semana en conocer la noticia

de su retorno temporal, para darle muerte a tiros en un bar de la ciudad de Tolosa,

pasando a tranformarse, ésta en otra prueba abrumadora de la efectividad de la

organización, que ha motivado comentarios escandalizados de la prensa española.

Actualmente, se considera que, -tal como señala en su edición del miercoles EL

PAÍS-, la ETA usó en realidad el año de tregua para recuperarse de los sucesivos

golpes que le habian asestado la fuerzas de seguridad y reestructurar sus llamados

“Comandos”, entrando a reemplazar por cuadros frescos a las personas que

figuraban en las primeras listas de la policía. Así, reaparece ahora mostrando un

pie combativo mejor.

Se trata, hoy en día -va a escribir finalmente EL PAIS- “de la mayor ofensiva

criminal desde principios de los ochenta. También de la mejor coordinada.... Desde

algún lugar seguro alguien da la orden de matar. Y al rato muere un hombre sobre la

barra de un bar.....”.-

 

RAL

Heidelberg (Alemania)

9 agosto 2000