Crisis Ganadera en Europa
EUROPA CONTINÚA ASOLADA POR LA PEOR
CRISIS DE LA GANADERÍA DE TODOS LOS
TIEMPOS


Por Rolando Arturo Leiva
9 marzo 2001


Heidelberg (Alemania) - A través de las más diversas -y a veces desesperadas
medidas- se seguía luchando, a todo lo largo de esta última semana en Europa,
por contener el brote de fiebre aftosa que tuviera sus comienzos en Gran Bretaña.
Esta última enfermedad, -que se viene a agregar a la de ESB, Encefalopatía
Espongiforme Bovina, o de “vacas locas”, cuyo origen es también Gran Bretaña y en
segundo lugar Francia, país este último que sin embargo apenas sobrepasa
actualmente la cantidad de 100 casos en ganado bovino y ninguno transmitido a
seres humanos-, generaba un panorama caótico de la ganadería a todo lo largo del
continente europeo, con medidas y contra medidas, pero principalmente a causa del
desastre económico que entraña y no tanto debido a su significación sanitaria que
sin duda es más bien reducida. Pero por sobre, todo el factor esencial de esta crisis
agrícola, es a causa de un público en estado absoluto de inseguridad respecto a la
capacidad gubernamental para hacer frente y manejar este tipo de situaciones.
Hasta la fecha, por el brote de fiebre aftosa aparecido en 348 ovejas en una granja
de Cleave al noroeste de Inglaterra y que habían sido transportadas a Dover para
ser exportadas a Alemania, se habían destruido en total en Gran Bretaña 80 mil
cabezas de ganado, las cuales, como dijera el INTERNATIONAL HERALD TRIBUNE
-periódico norteamericano que se edita en Europa- formaban “piras funerarias
masivas que han traumatizado el campo británico”. Al mismo tiempo, ello ha
conducido al sacrificio de 2000 cabezas en Alemania, 5000 en Francia, 4700 en
Holanda, 2500 en Bélgica y 540 de ganado porcino en España. Las medidas
decretadas recientemente obligaban, además, a todos los pasajeros y equipajes
provenientes de Gran Bretaña, a pasar por encima de una alfombra especial
impregnada de una sustancia desinfectante que humedece las suelas de los
zapatos. De la misma manera, al momento de desembarcar los pasajeros de un
vuelo proveniente de Gran Bretaña, se ha empezado a distribuir una nota a éstos
donde se advierte que si han visitado alguna granja con bovinos, ovinos, caprinos o
porcinos en el curso de su estadía en ese país, se debe evitar visitar otra granja u
otros lugares donde hubiera animales sensibles, por lo menos hasta 5 días después.
Igualmente, se llama a evitar arrojar los restos de comida que se hayan consumido
en Gran Bretaña o en el curso del viaje desde allá, sino depositarlos en una bolsa
especial que se debe transportar y llevar siempre a ciertos lugares. Finalmente, se
desinfectan también las autopistas, pasos fronterizos y neumáticos de los vehículos.


La Comisión Veterinaria de la Unión Europea decretaría por último el martes pasado
la prohibición de las ferias de carne animal, aunque no así todavía la prohibición de
cruzar ganados de un país europeo a otro, como solicitaban algunos países,
especialmente Italia. Sigue en curso, no obstante, la prohibición de importar carne,
leche y derivados de Gran Bretaña. La primera prohibición mantendrá su vigencia
hasta el 27 de marzo. Esta fecha permitirá determinar si se han producido contagios
en el Continente europeo, pues el período de incubación de la enfermedad asciende
a 14 días. Casos sospechosos en Holanda, Bélgica, Dinamarca y Francia, serían sin
embargo desestimados. El Comité Veterinario de la UE, se declara al mismo tiempo
conforme y tranquilo por las medidas adoptadas en Gran Bretaña, ya que el virus se
contagió antes del 23 de febrero, fecha en que se decretó la prohibición de trasladar
ganados de un punto a otro y no no después, lo que estaría probando que esta
última medida surtió algún efecto. Por otra parte, el primer Ministro de Suecia,
Groran Person -Presidente de turno de la Unión Europea- ha indicado que ya no
existen más fondos de la Comisión Europea para hacer frente a las pérdidas
actuales de la ganadería. El gobierno británico ha sostenido a su vez que el contagio
está llegando prácticamente a su “peak”, y ya no puede por tanto seguir
extendiéndose. En ese país, existían 70 granjas afectadas y se mantenían todavía
las medidas de restricción de los movimientos públicos, aunque empiezan ya a
levantarse ciertas medidas. Noruega, por último, dejaría sin efecto la participación de
soldados británicos en un ejercicio de la OTAN (NATO) a fin de evitar la posibilidad
de que el virus fuera transportado por éstos a ese país.


No obstante el trastorno general producido, era sin embargo opinión más o menos
unánime, que nuevas escalaciones de la crisis de la ganadería en Europa ya no son
previsibles.-


RAL
Heidelberg, Alemania
9 marzo 2001


(Una versión de este artículo fue publicada en el periódico digital Primera Línea, de
Santiago de Chile, bajo el título de Crisis Ganadera en Europa, por Rolando Arturo
Leiva desde Heidelberg, 11 de marzo 2001)