PROBLEMA INMIGRACION EN EUROPA

IRRESUELTO

 

Por Rolando Arturo Leiva

4 de mayo 2001

 

Heidelberg (Alemania) - La cuestión de la inmigración de extranjeros pasará a

constituirse, desde todo punto de vista, en el problema social más importante que

deberá enfrentar Europa en el futuro más próximo.

 

Sin embargo, a pesar de las necesidades ya constatadas en torno a tal tema y que

tienden día a día a agravarse, la Unión Europea todavía no logra superar sus

actitudes contradictorias en este sentido, las que fluctúan, entre el miedo y el

rechazo a la inmigración, por un lado, pero por otro, el reconocimiento de su

necesidad, a la vez.

 

En nada como en relación a este tema, las cifras resultan ser lo más elocuente para

entender la magnitud del problema. En primer término, se debiera siempre partir

señalando que la mantención de los altos niveles de vida de la población europea

actual, como también el grado de productividad existente y los beneficios sociales

que otorga el Estado en los diferentes países, obligan al Continente europeo a

mantener su número de población activa siempre constante. Lo contrario, podría

llegar a producir una crisis económica, y ello tendría inmediatas repercusiones en el

orden político.

 

Sin embargo, en los 30 años que están transcurriendo en estos momentos, y que

van desde 1995 a 2025, la población general europea crecerá prácticamente

apenas. Lo hará solamente desde la cifra de 372, a 386 millones de habitantes. Al

mismo tiempo -y a raíz del problema del envejecimiento de la población-, la

población activa llegará a experimentar incluso un leve descenso, bajando de 225,

a 223 millones de habitantes.

 

Esta realidad obliga, entonces, a que -para mantener la cifra de población europea

activa constante-, deban ingresar por año la cifra de 1,4 millones de inmigrantes a

los 15 países de la Unión Europea, y que deben además dividirse en los distintos

rubros de actividad en que son requeridos, por países, de la manera siguiente. En

Alemania, 35 mil nuevos trabajadores por año, principalmente en el ramo de la

informática. En España, 240 mil, principalmente en el rubro de la agricultura. En

Portugal, un cierto número de inmigrantes también, en el rubro de la enfermería.

No obstante lo anterior, simultáneamente con ello, -y demostrando así la

ambigüedad de las políticas europeas-, Alemania y Austria han conseguido extender

potencialmente hasta 7 años, la prohibición para trabajar en sus países, de los

trabajadores que pertenecen a los países del este, (Polonia, Rep Checa, Hungría,

etc) y que se incorporarán a la Unión Europea en dos años más.

 

Lo que existe en Europa, en la práctica, es entonces un solo fenómeno compuesto

de dos aspectos: la necesidad de la inmigración extranjera, conjuntamente con la

lucha contra la inmigración ilegal.

 

En total, la Unión Europea tiene registrados en estos momentos al interior de sus

países la cifra de 12 millones de inmigrantes, que se desglosan así: 5 millones en

Alemania, un número de más de 2 millones en Francia, y medio millón a la vez en

Gran Bretaña, Holanda, Italia y España, principalmente.

 

Pero se considera que existe a la vez alrededor de 3 a 4 millones de inmigrantes

ilegales dentro de la Unión Europea y un número calculado de alrededor de medio

millón tratando de entrar a la Unión Europea por año. Como consecuencia de ello,

Gran Bretaña ha debido anunciar entonces la expulsión de 30 mil inmigrantes

ilegales por año, y el mismo fenómeno ha conducido a la aplicación de medidas

especiales en Francia y España donde las regularizaciones intentadas de la

situación legal de los inmigrantes no autorizados, no han obtenido sin embargo el

efecto que se esperaba.

 

La vía de inmigración ilegal principal, la sigue constituyendo la llamada “via de los

Balcanes” y de Marruecos, a través de la cual intentan penetrar inmigrantes ilegales

a los países considerados “fronteras”, y que son, principalmente, España, Italia,

Alemania y Austria. Tal inmigración ilegal se la atribuye, en estos momentos, ante

todo a una Mafia especializada en el tráfico de personas y que se considera que

obtiene ingresos millonarios anuales con la práctica de este negocio.

 

En una de sus más recientes medidas, la Unión Europea ha decidido por eso,

desplazar policías de fronteras a los Balcanes a fin de detener la inmigración ilegal

en los países de origen. También Italia ha implementado un programa pionero en

este sentido, empezando a brindar capacitación a albaneses, ya sea para hacerlos

desistir de inmigrar hacia Italia, como para prepararlos para llevar a cabo una

entrada legal y ordenada a dicho país. Pero hasta ahora, sin embargo, no existe

todavía una coordinación de estas políticas a nivel de los 15 Estados que forman la

Unión Europea y ello se estima como la principal causa para que el problema se

siga agravando.-

RAL

Heidelberg, Alemania,

4 de mayo 2001

 

(Una versión de este artículo fue publicada en el periódico digital Primera Línea, de

Santiago de Chile, bajo el título de Sin resolver Problema de Inmigración en Europa,

por Rolando Arturo Leiva desde Heidelberg, 6 de mayo 2001)