Miscelánea Europea

DEPENDENCIA DE UNA SOLA FUENTE

ENERGÉTICA: RUSIA Y LOS PAÍSES

BÁLTICOS

 

 

Por Rolando Arturo Leiva

17 agosto 2007

 

 

Heidelberg, (Alemania) - La situación de dependencia en que han quedado los

países bálticos respecto a las vías de transporte de crudo y gas natural proveniente

de Rusia después del fin de la URSS, se ha constituído en una realidad que está

brindando toda una nueva fisonomía política a la región.

En un cierto sentido, velada o abiertamente, las vías de suministro de energía por

parte de Rusia -el principal proveedor de energía del mundo- se están transformando

en una herramiento política.

 

El año 2006, el gobierno ruso cerró el oleoducto de Druzhba -que quiere decir

“amistad” en idioma ruso, y que abastecía la refinería de Mazeikiu Nafta en Lituania

creada en tiempos de la Unión Soviética y que pasó a poder del gobierno lituano

luego del fin de aquella, el año 1991.

 

El Presidente de Lituania consideró en ese momento a aquello como una crisis

dramática, estimando al asunto político y no económico, y obteniendo apoyo del

resto de los países de la Unión Europea para su demanda de que se reabriera el

oleoducto, durante el desarrollo de la cumbre entre Lituania y Rusia que fuera

celebrada precisamente en la ciudad rusa de Samara.

 

Sin embargo, el ministro de energía ruso, durante una visita a Paris, declaró que el

gaseoducto no iba a ser reabierto, calificó el asunto meramente de técnico, -a

diferencia de la opinión de Lituania-, para agregar de manera irónica, que, a su

juicio, lo único que podía haber salido perjudicado por el cierre del oleoducto, era

una refinería en territorio lituano, cuyo nombre en esos momentos no recordaba.

Ya el año 2007, la compañía de oleoductos ruso Transneft había cerrado otro

oleoducto que suministraba crudo al puerto letón de Ventspils. A su vez, Gazprom

bloquearía, como se sabe, los suministros de petróleo a Ucrania en 2006, y al año

siguiente, a Rusia Blanca, afectando ya con ello a los consumidores del resto de

Europa.

 

De esta manera, en la actualidad, la refinería de Mazeikiu Nafta en Lituania, se

debe abastacer de petróleo a través de camiones tanques que lo traen siempre de

Rusia, y de envíos de Venezuela. La refinería ha sido sucesivamente poseída por

el gobierno lituano, vendida a una Compañía norteamericana, a la empresa Yukos

de Rusia y a una empresa polaca que, sin embargo, se abastece también del crudo

que proviene de territorio ruso.

 

Mientras tanto, el gobierno ruso ha creado su propia refinería, colocada ahora en el

mar báltico ruso, en el puerto de Primorsk, sorteando de esta manera a Rusia Blanca

y Lituania.

 

La situación del gas natural y la electricidad, coloca a Lituania en una posición de

dependencia aún peor. El 75% del consumo de gas lituano es recibido de Rusia, y

en cuanto a electricidad, el mismo porcentaje del 75% lo recibirá Lituania a partir del

año 2009, en circunstancias que en la actualidad alcanza sólo a un 34%.

 

A fin de expandir sus posibilidades enérgéticas, Lituania planea sí construir su propio

reactor atómico, en lo que está recibiendo ayuda por el momento de los otros dos

países bálticos y de Polonia.-

 

Rolando Arturo Leiva

Heidelberg, Alemania

17 agosto 2007

 

(Una versión de este artículo fue publicada en el Sitio Web InterEuropaReporte año 2007)