CONCLUSIONES DE LA CONFERENCIA
SOBRE EL SIDA REALIZADA EN SAN
FRANCISCO–USA
(PARTE I)
Por Rolando Arturo Leiva
26 de Agosto de 1990.
Durante el mes de junio pasado, se celebró en la ciudad de San Francisco, USA, la
VI Conferencia anual sobre el SIDA que ha arrojado conclusiones inquietantes sobre
el futuro de la salud humana para los próximos años. A fin de ir comprobando la
evolución de la situación, se van a celebrar en los próximos años Conferencias
sucesivas en las ciudades de Florencia, Boston y Berlin respectivamente.
La Conferencia ha reunido un número de asistentes cercano a los 10 mil
investigadores y 800 periodistas venidos desde todas partes del mundo, lo cual
representa, a juicio de algunos, la mayor atención prestada hasta ahora a una
enfermedad en particular. La Conferencia recibió alrededor de 2.500
comunicaciones, orales y escritas, abarcando campos desde la abstracta teoría
celular, hasta los hábitos sexuales de los conductores de camiones de ciertas
regiones rurales de Africa.
Lo que emerge de la Conferencia es en realidad un panorama sombrío para la salud
humana debido principalmente a las implicaciones sociales de la enfermedad,
siendo las peores previsiones que se podrían haber esperado desde el
descubrimiento del virus a la fecha.
No es por ejemplo la cuestión de obtener una vacuna contra el virus el problema
principal hoy día pues, como se ha señalado en la Conferencia, es ya
científicamente posible preparar una vacuna que se encuentre públicamente
disponible hacia fines de los años 90. Sin embargo, para esa fecha, ya habrán
grandes partes del mundo en vías de desarrollo y también del mundo desarrollado
occidental, que estarán experimentando fuertes pérdidas en vidas humanas, las
cuales irán acompañadas por pérdidas igualmente considerables en el plano
económico y social. De esta forma, el desarrollo de la enfermedad va probablemente
a sobrepasar la capacidad de atención de los servicios de salud existentes y aún es
posible llegar a afirmar que, la misma familia, pilar de la vida humana y la vida social,
va a estar amenazada de destrucción. El impacto que puede causar la enfermedad
es así comparable, para muchos, a una guerra que otros, sin embargo, se negarían
a reconocer que ya ha empezado.
Las estadísticas de la OMS (Organización Mundial de la Salud) dicen al respecto
que, en la actualidad, existe una persona entre 400 portadora del virus. Hay un
número de 263.051 casos de SIDA registrados considerando a 156 países, pero el
verdadero número, según la propia OMS, debe situarse en una cantidad ya tres
veces mayor, lo que significa unos 789 mil casos en todo el mundo. Hacia el año dos
mil, esta cifra de población afectada va a llegar no obstante a los 6 millones. Sin
embargo, el hecho de que exista un número muy superior de personas portando el
virus pero que lo ignora y que continúan infectando a otros, es considerado lo más
grave de esta enfermedad. De esta población portadora, una proporción que va del
50 al 75% va a desarrollar plenamente la enfermedad con todos sus síntomas. No
obstante, como el período de incubación del virus -es decir el tiempo entre haber
recibido el virus y desarrollado la enfermedad-, puede alcanzar un período tan largo
como 10 años, cobra trágica realidad la siguiente pregunta que se efectúa un
periodista, refiriéndose a esta parte de las conclusiones de la Conferencia. Si Ud
quiere saber si porta el virus, entonces, ¿con quién durmió diez años atrás ?. ¿Con
quién ha dormido durante los úlltimos 10 años?.
Esa cantidad de personas actualmente portadora del virus, ha sido calculada por la
OMS en 6 a 8 millones, pero se va a multiplicar a 15-20 millones de personas hacia
el año 2000. Por otra parte, aunque la enfermedad estuvo asociada al principio a
prácticas sexuales consideradas “desviadas“, al presente las infecciones proceden
en el 60% de los casos de contactos normales entre hombre y mujer, lo cual subirá
el los próximos años a una proporción del 75-80%. Dos tercios de los casos, ocurren
hoy en el mundo en desarollo, pero al final de la década, la proporción va a subir al
80-90%, volviéndose así el SIDA una enfermedad casi típicamente del subdesarrollo.
Arturo Leiva O.
Desde Europa
(Publicado en El DIARIO - (Finanzas.Economía.Comercio)- de Santiago
de Chile, 30 de Octubre de 1990.)