Sociedad
INMIGRACIÓN ILEGAL DEL ESTE DE EUROPA
Por Rolando Arturo Leiva
23 agosto 2007
Heidelberg, (Alemania) - Diversas indicaciones permiten concluir que la
inmigración ilegal hacia los países pertenecientes a la Unión Europea proveniente
desde regiones situadas al este de Europa, empieza a adquirir proporciones cada
vez más considerables.
En la actualidad, y hablando en términos generales, se estima que el problema de la
inmigración ilegal hacia Europa ha asumido las proporciones de un problema de
seguridad nacional que afecta a todo el continente europeo. Las estadísticas
permiten concluir que, al presente, entran a Europa 500 mil nuevos inmigrantres por
año, quienes carecen de la documentación necesaria.
La principal vía de entrada ilegal a Europa la constituye el Mediterráneo, y en ella
participan principalmente personas de origen africano que se ponen en
considerables riesgos para realizar el cruce de ese océano y penetrar al territorio
europeo.
Sin embargo, la inmigración desde regiones del este, ha empezado a asumir
proporciones también comparables, y en ella participan ante todo personas
provenientes de la región del mar Negro, procedentes de países tales como Georgia,
Armenia, Ucrania, Rusia Blanca y Moldavia.
La Unión Europea ha creado una organización especial para vigilar las fronteras
exteriores de Europa, y que responde a la sigla de Frontex, “Agencia europea para
la gestión de la cooperación operativa en las fronteras exteriores”, cuya sede se
encuentra en Varsovia y que cuenta con un Director Ejecutivo de nacionalidad
polaca también.
La vigilancia, controles y recorrido de rutas en la frontera sur europea mediterránea
ejercida por Frontex, a partir del mes de junio pasado, se considera, por eso, que ha
permitido disminuir en un 40% la inmigración ilegal realizada por esa región.
A su vez, gran parte de la inmigración proveniente del este se considera que usa la
vía de los Balcanes occidentales como entrada, y en torno a ella se ha detectado
también la existencia de fuertes intereses materiales, consistentes en los llamados
“traficantes de personas” que cobran a los que desean inmigrar por hacerlos entrar a
Europa.
De acuerdo al Comisionado de la Unión Europea para la Seguridad y la Justicia,
Franco Frattini, muchas de esas personas sufren explotación sexual, trabajo
esclavizado y otras formas de abuso.
La Unión Europea planea así poner en práctica una serie de sistemas y medidas
que permitan la inmigración ahora legal, pero, a la vez, que permita ello la
repatriación de los inmigrantes ilegales sorprendidos en territorio europeo.
El tráfico ilegal de personas, ha hecho considerar incluso a Unión Europea la
posibilidad de suspender la exigencia de visas, medida que apunta ante todo a
terminar o debilitar el poder de los grupos de intereses que se benefician con la
inmigración ilegal, y que están por eso interesados en fomentarla.
Asimismo, se ha puesto en duda la eficacia de la vigilancia posible de rutas de
inmigración ilegal que realiza Frontex, por el hecho de que ello favorecerá solamente
que se abran nuevas rutas , y al hecho de que los inmigrantes ilegales sorprendidos,
especialmente en situaciones de emergencia, deben ser igualmente transportados al
interior del territorio europea para brindarles la atención necesaria.
A pesar de ello, se planea que los patrullajes que realiza Frontex, se vuelvan
permanentes, lo cual, sin embargo, se considera que debiera estar acompañado por
pactos de reciprocidad celebrado con aquellos países del este del cual provienen en
especial la mayoría de los inmigrantes ilegales actuales.-
Rolando Arturo Leiva
Heidelberg, Alemania
23 agosto 2007
(Una versión de este artículo fue publicada en el Sitio Web InterEuropaReporte año 2007)