GRANDES TEMORES EN ALEMANIA POR
TERRORISMO “POSIBLE”


Por Rolando Arturo Leiva
12 de octubre 2001


Heidelberg (Alemania) - Actuando como por reacción, muchos alemanes han
descubierto que representan también una sociedad vulnerable y ello los podría poner
en la mira de potenciales ataques terroristas como los ocurridos en Sept 11 en EEUU.
El sentimiento de temor que ello ha producido era palpable así en la población la
semana pasada.


Solamente la posibilidad de ser objeto de un ataque terrorista similar al ocurrido en
Sept 11 en los EEUU, ha creado en efecto un indudable sentimiento de temor en
Alemania en esta semana, aún cuando no exista ninguna evidencia concreta que
pudiera apoyar tal eventualidad en estos momentos.


Pero una buena parte de ese temor, deriva asimismo del grado en que el gobierno
alemán se ha comprometido en su apoyo a los EEUU en la actual guerra que está
llevando a cabo en Afganistán.


Las dos fórmulas empleadas por el gobierno alemán para expresar tal apoyo, han
pasado a ser lo maximo que se pudiera llegar a decir en dicho sentido,
correspondiendo a la de “apoyo sin reservas” y “solidaridad ilimitada”. Ambas están
siendo transmitidas directamente por el Canciller Schroeder al Presidente Bush en
Washington en estos precisos instantes.


Otro de los factores que motiva ese sentimiento de ansiedad difuso alemán, es decir,
de temor no localizado en causas precisas, es la vulnerabilidad que advierten también
en su sociedad ante el tipo de ataques como los ocurridos en Washington y Nueva
York el 11 de sept pasado.


Haciendo alusión a este fenómeno el FRANFURTER ALLGEMEINE ZEITUNG
escribía a principios de esta semana: “un sentimiento de inseguridad en Alemania era
palpable el lunes después de la primera ola de ataques contra Afganistán”. Para el
mismo periódico, lo anterior había llegado a transformarse en una preocupación
oficial, de acuerdo a lo que escribía en un titular sobre el mismo tema señalando: “el
Ministro del Interior urge a a los alemanes a permanecer en calma”.


De alguna manera, Alemania se considera colocada así también en la primera línea
de fuego, si bien hay poco elementos que permitan fundamentar tal creencia. Y ello ha
traído como consecuencia la aplicación de medidas de seguridad extraordinarias,
especialmente a continuación de los ataques del domingo pasado, -sobrevenidos a
media tarde de acuerdo a la hora alemana-, y de los cuales indudablemente Alemania
estaba informada con antelación.


Otro elemento que demuestra la importancia política atribuida a la cuestión de la
seguridad interior, fue la reunión sostenida a primeras horas del lunes entre el
Ministro del Interior Federal Otto Schily, y los Ministros de Interior de los 16 Estados
alemanes. En el plano del orden y la seguridad interior, una reunión semejante casi no
tienen ningún precedente. Pero durante la reunión, se informaría de no haber
ocurrido ningún incidente digno de ser mencionado a todo lo largo de territorio
alemán. Esta sería una oportunidad también para que el Ministro Schily pidiera a la
población “permanecer en calma y no sobredramatizar la situación”, aunque agregó:
“podemos esperar que haya violencia contra instalaciones británicas y
norteamericanas pero no podemos andar por las ciudades pensando adonde nos
refugiamos del próximo ataque aéreo”.


Una buena parte de los temores alemanes se explican también por la existencia en
su territorio de dos grandes bases norteamericanas. La primera es la de Grafenwöhr
en Baviera. La segunda es la de Ramstein en el Estado del Rhin-Palatinado
considerada la más grande base aérea fuera de los Estados Unidos.


Sin embargo, de ninguna de las dos bases -ni ahora ni en el pasado- se han realizado
ni han partido operaciones ofensivas contra algún país. De la base de Ramtein, por
ejemplo, se limitarían a despegar el lunes pasado dos grandes aviones
norteamericanos cargueros C-17 con la misión de lanzar 37 mil raciones alimenticias
sobre el territorio afgano. La sola actividad especial que reporta la base de Ramstein
hasta estos momentos, es el acondicionamiento especial que ha dispuesto a fin de
recibir eventuales heridos que puedan resultar de las futuras operaciones terrestres
que han de seguir a los bombardeos que se están llevando a cabo en estos
momentos.


Otros aspectos dignos de mencionar en la actual situación de seguridad en Alemania,
son finalmente el escalamiento de la búsqueda especial de dos sospechosos
acusados de participar en la planificación de los atentados del Septiembre 11, nuevas
medidas especiales adicionales alrededor del aereopuerto y la torre de Frankfurt, -la
más grande de Europa con 209 metros de altura-, así como medidas de seguridad
en las plantas nucleares, incluso previendo la posibilidad de cerrarlas. Alemania “no
está en estado de emergencia”, agregó finalmente Schily. “La gente no debe ver
peligro detrás de cada esquina y esta es la razón para que actos públicos importantes
no hayan sido cancelados”.


La última alusión, hace referencia a la Feria Internacional del Libro de Francfort que
se inaguró como de costumbre este año, aunque se espera una afluencia de público
algo menor en relación a la del año pasado, que fue de 300 mil visitantes.-


RAL
Heidelberg, Alemania
12 de octubre  2001


(Una versión de este artículo fue publicada en el periódico digital "Primera Línea", de
Santiago de Chile, bajo el título de "Cómo Convivir con el Miedo al Terrorismo", "por
Rolando Arturo Leiva desde Heidelberg", 14 de octubre 2001)